A la hora de empezar a correr, es posible que a los principiantes se les haga un poco duro tener una disciplina de corredor para practicar de manera constante y efectiva, pero hay una buena noticia si quieres empezar: No es necesario adaptarse a disciplina de ningún tipo, puedes seguir estos consejos que te permitirán adaptarte gradualmente a esta práctica, brindándote en el camino muy valiosos beneficios. 

Sal a correr con compañeros

Una de las principales dificultades para quien no está acostumbrado a correr es pasar 10, 20, 30 minutos corriendo solo, sin hablar con nadie. Por eso lo recomendable es correr junto a varios compañeros, con ello podrás tener alguna conversación o compartir impresiones sobre lo que vas observando mientras trotas. Esto genera un efecto de compañerismo que hace más llevadero el trote, más el efecto de estímulo que te ayuda a optimizar tu condición física en grupo. 

Cuida el ritmo de tu carrera

Por regla general, hablamos de trotar para referirnos a un ritmo más suave que una carrera rápida, pero en este renglón entra una gran variedad de velocidades y es importante, incluso fundamental, que corras a un ritmo que te permita mantener una conversación con otro corredor. Si te fijas en la carrera de los soldados o cadetes, recordarás que ellos van cantando mientras corren, esto cuida su resistencia, ya que mientras puedan emitir estos cantos, están en un buen ritmo de carrera. 

En el primer consejo hablamos de correr junto a compañeros, esto es de provecho en este punto, ya que puedes tratar de entablar una conversación o hacer comentarios por ratos, de esa manera sabrás que llevas un ritmo adecuado. No sientas pena de decir que un ritmo es muy rápido para ti si ese es el caso. 

Camina y corre de manera alternada

No necesitas correr de manera constante y fija, si te cansas mucho puedes caminar unos minutos y luego volver a correr, eso te mantiene activo en el entrenamiento. No hay ningún problema en bajar el ritmo y caminar cuando te sientas demasiado cansado, sigue siendo un entrenamiento efectivo y de provecho, física y mentalmente. 

Elige zapatillas cómodas

En este punto debes tener cuidado, las zapatillas cómodas para ti no necesariamente son las de moda, las más caras o las que le gusten o le sirvan a tu vecino, pareja o compañero de trote, debes buscar la que sea agradable para ti y cumpla con los requerimientos básicos para unas buenas zapatillas de carrera. 

Descansa

No es necesario que corras todos los días de tu vida, tampoco tienes que hacerlo el primero de enero para demostrarle nada a nadie. Es sano tomarse uno o varios días de descanso a la semana, así como tomarte unos días libres en las fiestas.

Corre en varias superficies

Eso te permite aprovechar al máximo el ejercicio, prueba en distintas superficies, aunque esto es recomendable después de correr durante al menos un mes en una superficie en la que te sientas cómoda y que no sea muy exigente para tu condición.